jueves, 21 de abril de 2011


No creo en el destino como un futuro ya trazado e irreversible. El futuro lo trazan las circunstancias y muchas veces la casualidad.
Pero si, que hay que hacerle caso a las señales inequivocas que se nos ponen por delante. No se pueden evitar de por vida.

lunes, 18 de abril de 2011

Tengo miedo (por Alejandro Palomas)


“Cobarde no es quien teme, sino quien ni siquiera se atreve a sentirse temeroso.”

Porque, ¿qué es el miedo?

El miedo es lo contrario del amor (una definición menos occidentalista probablemente formularía un axioma como el siguiente: “El miedo es la otra cara del amor”).

“Sí, muy bien”, quizá pensarás. “Eso ya lo he oído muchas veces, pero no deja de ser una definición demasiado intangible, demasiado alejada de lo cotidiano.” Es cierto. La pregunta quizá debería ser otra –más fácil, más manejable–. Qué tal esta: ¿“cómo identifico al miedo? ¿Cómo lo reconozco para poder actuar sobre él”?

Muy sencillo: el miedo siempre paraliza. El amor activa.

Ahora demos un paso más. ¿Cómo se lucha contra el miedo?

Aceptándolo. Sin juzgarlo. Sin juzgarnos. Tener miedo no es ni malo ni bueno. No tenemos derecho a castigarnos por ello. Al contrario: aunque pueda parecer paradójico, el temor es simplemente un principio, una oportunidad de cambiar algo que la emoción rechaza y abraza a la vez por conocido, por adictivo. Sin embargo, deja de ser una oportunidad de cambio cuando el intelecto –lo aprendido– alza la voz y nos condena: “Tener miedo te convierte en cobarde”. No es cierto. Tener miedo nos enfrenta a la posibilidad de decidir, de proyectarnos, aunque sea durante un fugaz instante, en el futuro. La mente se equivoca: cobarde no es quien teme, sino quien ni siquiera se atreve a sentirse temeroso. Cobarde es quien vive esquivando el miedo porque donde no conoce tampoco el amor que lo libera. Cobarde es quien no siente, quien no cuenta con la emoción para llegar a ser quien realmente desea ser.

Desde aquí quiero hacer un llamamiento a todos los que estáis ahí fuera, leyendo estas líneas, y animaros a que cuando os reconozcáis asustados –asustados en lo cotidiano, en lo automático, en esas pautas aprendidas que paralizan– lo hagáis desde la emoción, sin juicios. Quiero que os acerquéis al espejo más cercano y os miréis tranquilamente a los ojos y, sin vergüenza y sin castigo, empecéis por el principio de los principios y os atreváis a oíros decir: “Sí, tengo miedo”. Repetidlo cuantas veces podáis y seguid haciéndolo hasta que poco a poco, tardéis lo que tardéis, cambiéis la afirmación por esta otra: “Sí, siento miedo”.

Que se haga entonces el silencio. Miraos bien. Solo siente miedo quien tiene la posibilidad de no sentirlo, quien puede elegir, aunque quizá no sea aun consciente de ello.

Solo siente miedo quien no es el miedo.
¿Qué somos pues, si no somos miedo?
La otra cara de la emoción.
Amor. Amor asustado, sí. Pero amor, al fin y al cabo.
No deberíamos olvidarlo.
Es un buen principio.

miércoles, 13 de abril de 2011


Si quieres tener el mar, contémplalo y abre tus manos en sus aguas y todo el mar estará en ellas. Porque si cierras tus manos para retenerla, se quedarán vacías.

Si quieres tener el sol y gozar de su luz maravillosa, abre los ojos y contempla, porque si los cierras para retener la luz que ya alcanzaste te quedarás a oscuras.

Te parte el corazón ver a quien amas ser feliz con otra persona, pero es mas doloroso saber que quien amas es infeliz estando contigo.

Una cosa triste de la vida es cuando conoces a alguien y te enamoras, solo para encontrar al final que nunca funcionó y que has perdido años de tu vida en alguien que no valió la pena.
Si el o ella no vale la pena ahora, el o ella no valdrá la pena en un año o en diez años. Dejalo ir...

domingo, 10 de abril de 2011

¿Falsas palabras?


Que me pides ? que renuncie a hablar contigo. Que renuncie a tomar un cafe con la persona que quiero?

No pienso salir de tu vida mientras no represente una molestia real para ti

Que quieres ? Que no vaya tan deprisa? tranquila,en los fuegos me puedo meter casi encima de las llamas ,si hace falta doy un paso atras

Pero solo para que baje la temperatura y poder acercarme de nuevo